En un acto público, ambos firmaron el acuerdo político que da vida a su alianza presidencial. Nasralla depone sus aspiraciones y se une como designado presidencial de Xiomara Castro.
Nasralla se encontraba en una tercera posición, según las encuestas privadas, tras el liderazgo de Castro y en segundo lugar el oficialista Nasry Asfura. Castro dejó abierta la posibilidad de que otras fuerzas políticas se unan a esta alianza.
Esta unión de Salvador Nasralla crea mayor fuerza en la candidatura de Xiomara Castro de Zelaya, quien no tendría ya ningún problema en lograr más de un millón de votos para asegurar la victoria.
Cada partido mantendrá sus candidaturas al Parlamento y las alcaldías alrededor del país. La unión se certifica solo a nivel presidencial.