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Lima, 7 feb (RHC) La demanda de esclarecimiento de la muerte de un manifestante opositor tiende a intensificarse en Perú, tras un reportaje que evidenció que fue víctima del disparo directo de una granada de gas lacrimógeno.

La familia de Víctor Santisteban y la abogada que lo representa demandaron mayor celeridad, pues el informe reveló también que las pesquisas no registran avances.

El reportaje recogió evidencias forenses que se suman a un video, en el cual un policía se acerca a manifestantes que permanecían en actitud pasiva y a varios metros de distancia apunta directamente al cuerpo con su escopeta de gas lacrimógeno y al instante cae Santisteban.

Elizabeth, hermana del occiso, denunció que la Fiscalía no ha hecho su tarea. “No han obtenido los videos por falta de presupuesto”, señaló, y su abogada Katya Pinedo calificó ese hecho como inaudito.

La dueña del negocio, cuyas cámaras de vigilancia registraron la escena, declaró que el registro de la cámara no fue pedido por ningún fiscal ni policía, a quienes el Gobierno dejó el tema, tras sugerir que Santisteban -el civil muerto durante la protesta número 47- habría sido víctima de una pedrada.

Ante las evidencias, el jefe de la Policía de Lima, general Víctor Zanabria, sostuvo que el impacto de una granada de gas lacrimógeno no es mortal y que Santisteban habría sufrido un impacto mucho mayor.

“Los huesos de la cabeza son los más duros del cuerpo y no se penetran ni con el proyectil de un revolver de calibre”, dijo, aunque su versión fue desmentida en el reportaje

Agregó que la investigación de criminalística “tiene que determinar la distancia que requiere el objeto duro para causar esa factura y en base a ello vamos a determinar quienes estuvieron presentes y con ello determinar a los responsables del hecho”, lo que supone a priori que fue golpeado por otro manifestante.

El periodista Eloy Marchán señaló que, luego de difundirse el video en el que “se ve a un policía disparar una bomba lacrimógena en la cabeza a Víctor Santisteban, no debemos olvidar los miserables y mentirosos comunicados” del Ministerio del Interior sobre el hecho.

Se refirió a que, en un primer momento, ese organismo y el de seguridad social (EsSalud) informaron que Santisteban sufrió una herida contuso cortante detrás de la oreja derecha, producto de un golpe policontuso y con traumatismo encéfalo craneano grave

Esa misma noche cambiaron el informe y señalaron en nuevos comunicados que el manifestante sufrió una “herida contuso cortante en región retroauricular derecha producto de un golpe”, minimizando la gravedad del caso, según fuentes médicas.

De acuerdo con la Coordinadora de Universidades de Lima, “a pesar de los intentos del Gobierno y sus aliados por encubrir la forma en la que fue asesinado Víctor Santisteban, todas las pruebas señalan que la Policía lo mató con el disparo de una bomba lacrimógena”. (Fuente: Prensa Latina).