Madrid, 22 ene (RHC) El rey Felipe VI sella hoy sus consultas para proponer un candidato a presidente del Gobierno español, cuando reciba a los líderes de los tres partidos más votados en las elecciones generales del pasado 20 de diciembre.
Tras cuatro días de conversaciones con las fuerzas políticas representadas en el Congreso de los Diputados, el monarca se reunirá este viernes con los máximos dirigentes de los partidos Popular (PP), Socialista Obrero Español (PSOE) y Podemos, informa Prensa Latina.
En los comicios de hace un mes, el PP resultó la agrupación más votada, pero sin lograr la hegemonía en la Cámara baja para permitir la reelección del presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy.
Los populares consiguieron entonces 123 escaños, lejos de los 176 establecidos como mayoría absoluta para mantenerse otros cuatro años en el poder.
El PSOE quedó segundo con 90 diputados nacionales, seguido de Podemos (centroizquierda) y Ciudadanos (centroderecha), con 69 y 40 asientos, respectivamente.
La irrupción de estas dos últimas formaciones en el tablero político, dominado en las últimas tres décadas por populares y socialistas, dejó el Congreso más fragmentado de la democracia.
El primero en encontrarse hoy con Felipe VI será el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, a quien seguirá su homólogo del PSOE, Pedro Sánchez, y por último Rajoy, quien la víspera confirmó que se someterá al debate de investidura.
De no conseguir, como es previsible, mayoría absoluta en una primera votación, el jefe del PP deberá someterse a una segunda sesión de investidura 48 horas después, cuando sólo necesitará una mayoría simple para ser reelegido.
Si después de esa segunda vuelta tampoco logra el respaldo necesario, el secretario general del PSOE anunció que intentará armar un gobierno alternativo, para lo cual buscará una difícil alianza con Podemos y Ciudadanos.
A partir de la primera sesión de investidura empiezan a correr los dos meses reglamentarios para tener un nuevo inquilino en el Palacio de la Moncloa (sede del poder central) y evitar la convocatoria de nuevas elecciones.
