Washington, 20 oct (RHC) La doctora estadounidense Samira Addrey, egresada este año de la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), agradeció a Cuba por la educación brindada a ella y a otros miles de profesionales de la salud.

En un video publicado en la página de Facebook de la Fundación Interreligiosa para la Organización Comunitaria (IFCO)-Pastores por la Paz, Addrey expresó su profunda gratitud al pueblo de la isla 'por haberme entrenado a mí y a los otros miles de graduados de ELAM en el espíritu digno de solidaridad'.

Nuestra formación profesional como médicos de ciencia y conciencia estuvo dominada por los valores esenciales de la vida, agregó la doctora, quien dijo que los egresados de esa institución con sede en La Habana 'hemos heredado una brillante antorcha de la patria cubana que ilumina el camino por delante para todo el mundo'.

Sostuvo que, en el contexto de la pandemia de la Covid-19, la marca de la solidaridad cubana tendrá un efecto más positivo a nivel internacional que las ideas imperantes de individualismo y egoísmo.

Cuba ha sido solidaria, no solo entrenando a los hijos de otras naciones para que sean médicos y salven vidas, sino que ha demostrado solidaridad como siempre en el envío de sus médicos a diferentes partes del mundo, a donde nadie quiere ir, resaltó Addrey, quien se desempeña como coordinadora del programa de la beca ELAM para IFCO/Pastores por la Paz.

Les pregunto a todos hoy, ¿hay algún precio para todo ese trabajo? ¿Existe algún tipo de compensación por ese sacrificio de los valientes?, añadió la profesional de la salud.

Addrey llamó a tomar en cuenta el mensaje expresado por el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel,  en mayo pasado en la Cumbre Virtual del Movimiento de Países No Alineados, cuando dijo: 'si hubiéramos globalizado la solidaridad como se globalizó el mercado, la historia sería otra'.

En momentos en los que la administración del presidente estadounidense, Donald Trump, arremete contra las misiones médicas de Cuba en el exterior, la doctora instó a rechazar vehementemente cualquier ataque 'contra la calidad de la colaboración médica cubana en todo el mundo'.

Pidió entender que quienes respaldan esa difamación son 'los responsables del genocidio más despreciable de la historia de la humanidad, el del bloqueo contra Cuba desde hace más de 60 años'.

También acusó a quienes promueven esa política hostil de ser los responsables de la negligencia más grave en medio del enfrentamiento a la Covid-19, cuando las comunidades vulnerables mueren 'debido a las desigualdades en mi país, Estados Unidos, un país que supuestamente es desarrollado'.

La Revolución cubana sigue manifestando amor y solidaridad hoy y siempre. Tenemos que persistir en eso, resistir cualquier cosa contra ella y nunca renunciar a nuestro derecho humano de crear un mundo mejor, apuntó.

(Prensa Latina)