La Habana, 14 feb (PL) El emblemático teatro Martí de La Habana acogió el sábado un concierto de música sacra y canciones populares rusas, celebrado en honor de la visita oficial a Cua del Patriarca de Moscú y toda Rusia, Kirill.
El homenaje, materializado en aplaudidas interpretaciones del Coro del clero de la Eparquía (equivalente a diócesis) de Moscú, transcurrió con la presencia de Su Santidad Kirill, Primado de la Iglesia Ortodoxa Rusa, y del primer vicepresidente cubano, Miguel Díaz-Canel.
Asimismo, contó con la participación de la solista Nadezhda Kryguina y del quinteto de solistas del Conjunto Académico Estatal "Rusia", de Lyudmila Zykina, que con cuatro décadas de fundado constituye una agrupación embajadora de la cultura de su país.
Momentos especiales del concierto fueron la interpretación de Kryguina de la legendaria canción Katyusha, que narra el sentir de una joven soviética por su amado en tiempos de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), y de la pieza Guantanamera, por parte del coro clerical.
El teatro Martí, inaugurado en 1884 bajo el nombre Irijoa, gozó de gran aceptación popular en la sociedad cubana de la segunda mitad del siglo XIX y la primera del XX por su programación de obras del teatro bufo, su céntrica ubicación y sus apropiadas soluciones de diseño y tecnología.
En 1900 fue rebautizado con el nombre actual, alusivo al Héroe Nacional de Cuba, José Martí (1853-1895). Un año después quedó marcado para siempre en la historiografía nacional al servir de sede a la Asamblea Constituyente encargada de redactar la primera Carta Magna para la república cubana.
Tras 40 años de cierre por su deterioro constructivo, el inmueble, llamado también popularmente como teatro de las cien puertas, fue reinaugurado en 2014.
El concierto acogido por la instalación en la jornada culminó una intensa jornada del Patriarca ruso, la penúltima de una visita que inició el jueves.
Como parte de esta, Kirill visitó la escuela de educación especial Solidaridad con Panamá y rindió tributo al soldado desconocido soviético, en el Mausoleo que los honra en las afueras de esta capital.
Asimismo, el Primado fue investido por el presidente Raúl Castro con la orden José Martí, la máxima distinción que otorga el Consejo de Estado de la República de Cuba.
La agenda de Kirill, quien realiza su cuarta visita a Cuba, pero la primera como Patriarca, comprendió el viernes un momento trascendental: su encuentro con el papa Francisco, Sumo Pontífice de la Iglesia Católica.
Ambos líderes religiosos suscribieron un documento, la primera declaración conjunta desde el gran cisma que separó a las Iglesias Católica y Ortodoxa en 1054, en el que piden la unidad de acción de los cristianos en pos de la paz, y llaman a la comunidad internacional a poner fin a la violencia y al terrorismo.