La Habana, 30 oct (RHC) El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos impide a Cuba la adquisición de equipamiento de laboratorio, programas informáticos y reactivos para el óptimo desarrollo del Centro Nacional de Genética Médica.
La doctora Yudelkis Benítez, subdirectora de esa institución, explicó a la prensa que el cerco estadounidense es el principal obstáculo que tienen para el avance del programa nacional de diagnóstico, manejo y prevención de enfermedades genéticas y defectos congénitos.
El actual recrudecimiento de la medida unilateral impacta negativamente en esta actividad desde el punto de vista material y social, en particular la atención a los pacientes, así como la preparación y capacitación de los profesionales para la aplicación de la genética en sus diagnósticos, afirmó.
Mencionó que Cuba utiliza reactivos como el anminiomax muy costosos, adquiridos a través de terceros países y empleado en el estudio de enfermedades cromosómicas y el estudio prenatal de las gestantes, el cual es producido por la firma Termoficher Scientific que desde su página web niega el acceso a la información de este producto.
Benítez también se refirió a la negativa para la participación de especialistas cubanos en cursos ofrecidos por esa misma empresa sobre actualización en técnicas avanzadas de genética, argumentando la imposibilidad de establecer contactos y negocios con instituciones de la nación caribeña.
No obstante, afirmó la también máster en genética, el Centro ha logrado el diagnóstico de más de 120 enfermedades y la adopción de estrategias para no afectar los equipos de preservación de muestras biológicas, aun en los momentos de crisis energética cuando urge el ahorro.
Asimismo, no se han detenido las investigaciones y prescripciones de enfermedades frecuentes como la ciclemia o enfermedades cromosómicas que se realizan en los centros provinciales, además de las que demandan ser llevadas al exterior para ser analizadas con todas las regulaciones establecidas, excepto a Estados Unidos.
Esta práctica, aseguró, obstaculiza el rápido diagnóstico de enfermedades, su tratamiento y el asesoramiento genético al paciente y la familia, así como la asistencia médica que no puede desplegar todas sus posibilidades.
Comentó la subdirectora del Centro que en la actualidad es muy necesario el empleo del equipamiento conocido como Ilumina, el cual provee más del 90 por ciento de los diagnósticos de enfermedades en el mundo, pero el país no cuenta con esa tecnología debido al bloqueo.
La principal dificultad está en que muchas compañías de medicamentos exigen la validación por ese equipo para la aplicación de tratamientos específicos, una prueba más de la imposibilidad de acceder a las bondades de la medicina personalizada en beneficio de los pacientes cubanos y el desarrollo de la genética médica en el país. (Fuente: PL)