Las infecciones de coronavirus en el mundo superaron los 13 millones este lunes, de ellos se reportó un millón de casos en apenas cinco días, en el marco de una pandemia que ha acabado ya con la vida de más de medio millón de personas.
El director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, descartó una vuelta a la normalidad en un futuro previsible, ya que demasiados países van en la dirección equivocada.
«El virus sigue siendo el enemigo público número uno. Si no se siguen los principios básicos, la única forma en que se desarrollará esta pandemia será de mal en peor. Pero no tiene por qué ser así», dijo el directivo.
El recuento, que está basado en reportes de los gobiernos, muestra que la enfermedad se está acelerando ahora en Latinoamérica. América tiene más de la mitad de las infecciones en el mundo y alrededor del 50 % de las muertes.
Varias partes del mundo, especialmente Estados Unindos, con más de 3,3 millones de casos confirmados, está reportando fuertes aumentos durante la primera ola de la epidemia de la COVID-19, en tanto otras zonas muestran un aplanamiento de la curva y están aliviando sus restricciones.
La Florida, actual centro de la pandemia, registró un incremento récord de más de 15 000 casos en 24 horas el 12 de julio, más que el total de Corea del Sur desde que el coronavirus fue identificado por primera vez a fines del año pasado. Este lunes, Florida contabilizó otras 12 624 infecciones.
Estados Unidos marcó otro récord global de 69 070 nuevas infecciones en 24 horas el 10 de julio. En Brasil, un total de 1,86 millones de personas se ha contagiado, incluyendo al presidente Jair Bolsonaro, y más de 72 000 han perdido la vida.
Algunas ciudades, como Melbourne en Australia y Leicester en Inglaterra, están implementando una segunda ronda de confinamientos. Hong Kong, pese a tener una cifra relativamente baja de 1 522 casos, volverá a reforzar las medidas de distanciamiento social. (Fuente: Granma).